Paciente joven, que acude a nuestra consulta, después de 10 días de la mordedura de gato casero, pero este estaba comiendo restos de pollo que estaban matando y limpiando. La paciente padece una trombocitopenia (enfermedad en la que se manifiesta un recuento bajo de plaquetas.)
En el primer momento acuden al servicio de urgencias, y le pautan un antibiótico por vía oral, ciprofloxacino 750 mg, pero la paciente al 4º día vuelve a acudir al médico por dolor cada vez mas en aumento y síntomas de infección.
El doctor le cambia el antibiótico; Anaclosil 500 mg.
A los 10 días del mordisco, vuelve al servicio de urgencia del hospital por seguir encontrándose mal y con dolor, allí deciden cambiarle la antibioterapia por vía oral, amoxicilina – clavulánica 850 mg (tres veces al día).
La paciente viene a nuestro servicio de enfermería a los 14 días del mordisco del gato, después de acudir a urgencias tanto hospitalarias como de su ambulatorio, y de prescribirle 3 antibióticos distintos.
En la primera exploración vemos que presenta absceso con acumulación de pus en zona alrededor y entre los dos agujeros de los colmillos. Se abre por medio de pequeño corte una zona para que pueda drenar todo el pus.